jueves, 21 de febrero de 2013

+++A Stupid Boy+++ by Koneko S. Akira


Título: A Stupid Boy
Género: Romance, Yaoi
Track Recomendado: Because I’m Stupid cover Spanish Sebastian Dupont Irving
+++A Stupid Boy+++
Un joven rubio de ojos esmeraldas, estaba sentado sobre la cálida arena de la playa, con amplia vista a al cristalino mar, que reflejaba la belleza de la luna en el...  
Su cabeza era un desastre, llena de pensamientos contradictorios entre sí, soluciones, repuestas, pero sobre todo preguntas, que no logra descifrar...
Cuál es la salida más efectiva a su problema?
-Cuanto más?-se cuestiona en su mente, un dolor agudo le comienza a molestar, y sabe perfectamente que no es por estar casi toda la tarde mirando a la nada, como un idiota, es porque sabe que debe hacer algo para detener esa agonía, por quien sabe que sucederá si llega el momento en que deba perderle-  Kiku..- pronuncia con suavidad y una melancólica sonrisa aparece en su rostro.
Ese chico, aquel que conoce desde los diecinueve años, que se ha convertido en su consuelo, su pañuelo de lágrimas, ese chico asiático de cabello oscuro y personalidad ambigua, además de reservada, él, esa persona es quien hoy tiene su corazón.
Y debería de estar feliz...
Ya que ha vuelto a sentir algo que jamás pensó siquiera volver a revivir...
El querer a alguien, el que alguien sea importante para ti, pero lo que siente por aquel compañero suyo es más que solo querer, podría clasificarlo como Amor, un profundo Amor...
Pero nada es sencillo, nada lo es; y ahora está aquí cuestionándose que hará.
Confesarse? O solo guardar silencio por la eternidad?
Teme más que nada a que le rechacé y que de su lado se aleje, porque podría soportar muchas cosas, de hecho lo ha logrado alrededor de su vida, haber pasado por más de calamidad le ha hecho tener experiencia sobre a lo que la vida se refiere, pero le ha dado miedo de perder lo poco que tiene, pero algo que no podría superar es el no poder tener a su Kiku a su lado, es tan feliz cuando está a su lado, que solo desea, hacer todo lo posible para verlo feliz...
Es por eso que no sabe qué camino elegir...
Las lágrimas ya son incontenibles, el rubio trata de cubrirse el rostro con sus manos limpiando inútilmente el rastro de agua salada de su piel, pero ahora las gotas se han multiplicado convirtiéndose en un llanto inocultable...
Porque lo sabe...
Él lo perderá, lo perderá por ser un cobarde, porque ya ni siquiera una oportunidad tiene, porque hay otra persona que sin tapabujos ni nada le ofrece todo lo que él jamás le dará, demasiado perfecto para negarle esa felicidad.
Pero eso no significa que no duela...
- Maldición!- un grito ahogado se escapa de su garganta, su manos se hunden en la arena con fuerza y frustración, su nudillos lentamente se vuelven blancos, el llanto de sus ojos desciende a través de sus mejillas y surcan así hasta perderse en su cuello, es abundante el dolor, ya no se contiene no le importa ya nada, solo quiere dejar vacío a su corazón de todas esos sentimientos y emociones que le abruman.
No era competencia para esa persona, por mucho que le ame no puede contra ello, está seguro que incluso el pelinegro le corresponde, los ha visto platicar, se entienden bastante bien, sus personalidades son casi la misma, eso crea armonía, y él? él es tan diferente es una persona que se esconde detrás de una máscara de autosuficiencia, cuando en realidad está asustado.
No lo merece y lo sabe....
Ya con el alma destrozada ante un descubrimiento tan obvio, no es capaz de descifrar que es lo que siente…
Una voz resuena a lo lejos, realmente el destino es cruel y cizaño con su alma, aquella voz pertenecía a su mayor felicidad, acercándose corriendo hasta parar a su lado, apenas el de verde mirar tuvo tiempo de borrar la evidencia del quiebre de su sensibilidad.
-Arthur - san – su respiración entrecortada por el esfuerzo de correr en la búsqueda del británico- me puede explicar donde ha estado todo el día? Lo he buscado por todos lados…- aquellas últimas palabras hicieron a su corazón envolverse de una calidez indescriptible...
-soy un idiota le hice preocuparse… soy un egoísta- aquel pensamiento atravesó su mente, y una sonrisa leve y fingida apareció mecánicamente- Lo lamento Kiku está realmente extasiado viendo el mar que no me percate de nada mas- lo intentó tranquilizar con aquellos vocablos, el joven lo miro detenidamente, dándose cuenta de que le mentía, lo supo al notar aquella insignificante lagrima brillar tal cual cristal, se escuchó un suspiro de los labios del de ojos obscuros…
-Que sucede?- de forma concisa y directa resonó esa pregunta, mientras su pálida mano se posaba en la mejilla izquierda del contrario retirando aquella traidora y delatora gota, dándole la certeza a su dueño que había sido descubierto…
El oriental pudo ver como aquellas esmeraldas, se cristalizaban peligrosamente, el de cabellos más claro, oculto su mirada detrás de su cabello, mientras se mordía el labio y apretaba fuertemente los puños…
-Arth…- intento llamarle, pero fue interrumpido por el otro…
-Please…- susurro audiblemente, mientras levantaba el rostro dejando ver una expresión decidida-  I´m Sorry – le dijo tan cerca, mientras su brazo izquierdo se amoldaba a la cintura del chico y así unión sus bocas en un sorpresivo pero intenso beso.
La caricia duro unos segundos apenas, no tuvo ningún tipo de correspondencia, sus labios dejaron de tocarse lentamente, el inglés sintió una gran tristeza invadirle, deseo volver a llorar…
-I´m Sorry- le dijo sin mirarle no se atrevía a hacerlo, pero debía hacerlo, fue impactante la imagen de ver a Kiku con los ojos llenos de lágrimas, se sintió culpable…
Entre esta escena pasos acelerados se escuchaban, hasta que hizo acto de presencia aquel hombre, el pretendiente de su Kiku…
-Ki…- quedo callado al notar las finas gotas que dejaban libres los ojos del bello japonés, miro hacia a Arthur y con furia pregunto qué era lo que había pasado. Al no obtener respuesta se acercó a este desafiante.
-No te preocupes no pasara de nuevo- fue la contestación del rubio en el mismo tono, para luego darse media vuelta para escapar de una vez de todo…
Aquello llego a los oídos del asiático, que le miro, lo veía irse, sabe que él no va a volver…
-no!!!- aquella suplica sorprendió a ambos hombre aun presentes, el ojinegro decidió recuperar un poco la compostura- Heracles-San – se dirigió al castaño- por favor podría dejarnos solos- le pidió desesperadamente
-pero yo…-el griego trato de objetar…
-Por favor- elevo el tono de voz el menor, sorprendiéndolo – déjenos solos, discúlpeme, pero esto es un tema entre Arthur y yo- era la primera vez que se oía al asiático, pronunciar algo con tanta firmeza…
-Está Bien- el castaño susurro y los dejo en soledad, no sin antes mirar de mala manera al Británico.
Una vez que Heracles desapareció de su campo visual, el de ojos claros comenzó…
-Kiku no tienes por qué preocuparte, todo está perfecto…-agrego pensando que quizás el japonés se sentía comprometido hacia él- Bye- le dijo con pesadez, era lo mejor…
-No te vayas Arthur- le pidió suavemente, mientras se posicionaba frente a él, de un impulso esos pálidos brazos envolvieron al otro desde el cuello, acercándole…
-Que es…- lo miro a los ojos con incredulidad- …lo que haces?- su contestación fue aquel cálido y suave beso que le era entregado , lo degusto con tranquilidad.
Quizás era un sueño? Quizás cuando él despierte ya no esté a su lado.
Aquel contacto termino, entre suspiros y exhalaciones forzadas, mirándose, no despegando sus ojos del otro…
-Kiku- susurro Kirkland, apoyando sus manos en la mejillas de su acompañante, y juntando sus frentes-Kiku, kiku, te lo suplico no me des esperanzas-le pidió entrecerrando los ojos.
-No es un juego Arthur…- le contesto tiernamente, el otro con solo escuchar de esa forma su nombre pronunciado lo hacía derretirse.
-Planeas matarme- le confeso en broma, mientras lo abrazaba con efusividad- Pero aun así Te Amo- una gran sonrisa acompaño a esas dulces palabras que apenaron al asiático-  You’re cute, I love you, Honey-le susurro besándole la punta de la nariz, lo que causo el enrojecimiento aún más de las mejillas de su persona especial…

Owari
The End
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Podría abandonar todo con tal de verte sonreír, porque mi felicidad eres Tu…
Koneko Sasuki Akira
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Nota de autora:
Es una unión Anglo japonesa XD así que bueno que les pareció? Díganme! T_T se que la pifie con el final pero bueno ahí murió la idea u_u. Tengo otro se llama Independencia es un No- USAxIggiko XD y con leve pro AsaKiku. Opiniones, críticas, las acepto, -.-

+++Final Attraction+++ by Koneko S. Akira


Prologo

"Las personas viven momentos afectivos de alto contenido sentimental, que se ven expuesto en su estado emocional que son los factores comitentes, que se destacan por su intensidad y poca duración, estos se ven afectados por  los estado de ánimos influyentes al tono de agrado o desagrado,  la subjetividad del sujeto y su construcción cabe destacar que las emociones, pueden llegar a regularse e inhibirse, según el sujeto haya aprendido a controlarlas y los factores culturales predominantes.  Mientras que los sentimientos perduran, y se basan un objeto, hecho o persona pero esta su explicación encerrada en el sujeto, no es por nada este tipo de fenómeno psíquico más complicado de determinar….
Con esta conceptualización, procedo a explicar que los sucesos de nuestra vida, nos marcaran dependiendo de nuestra personalidad, no se le puede adjudicar un sentimiento  determinado, ni una emoción específica a una situación en particular,  estos se construyen en base a uno mismo. Es por eso que es imposible juzgar la relevancia que le da una persona aquello que forma parte de su vida afectiva”
A.H
Sentada en aquel taxi con un rumbo desconocido, aquella chica  terminaba, de leer la página doscientos nueve de un libro cuyo tema era La personalidad y La construcción del yo explicadas por una psicóloga muy famosa en la última década, sonrió con agrado a concordar con lo expuesto, preguntándose qué nueva experiencia  le obsequiara en la nueva edición pronta a publicarse.
Se sentía sumamente intriga con la actitudes que las demás personas toman atente las distintas situaciones, y quizás lo que más le interesaba era que  lograba comprenderse más a sí misma.
Un suspiro escapo de sus labios, estaba exhausta, el leer había sido un buen método para alejar de su mente, las ideas referentes a su triste realidad, entre esos caóticos pensamientos, se mentalizo su deseo de obtener una vida mejor.
Pero de un momento a otro todo se desmorono, a quien iba a engañar ella sabía que jamás conseguiría algo así, su semblante tristemente se hizo perceptible, guardando aquel manual en su mochila, mientras miraba con desagrado aquel edificio frente a ella, no era lo que quería, no era lo que deseaba, pero no pudo conseguir algo que se adaptara mejor a sus condiciones actuales....

 Odiaba la vida que le toco, pero sus lamentaciones no la llevaran a ningún lado, tomo aliento y camino hacia su destino, no importa cuán difícil sea el ascenso ella lograría llegar a su objetivo, por qué es lo que desea…

En la vida solo se logra triunfar  con esfuerzo y dando algo a cambio si algo igual de importante que el sueño impuesto, aunque eso signifique sufrimiento

Bajo y camino un par de pasos

-no puede ser…- susurro vacíamente, y continuo hasta la entrada

Al adentrase, fue recibida, por una niña de no más de dieciséis años de rubia cabellera y ojos entre celestes y verdes de apariencia dulce, pero su rostro no mostraba expresión alguna…

-Hola...-soltó sin formalismo, la jovencita..

-Buenos días, Annabella Evans mucho gusto- le sonrío apenas  presentándose, pero no recibió respuesta, solo la miro detenidamente- Disculpa, vengo por el anuncio-le comunico- Me podrías decir con quien debo de reunirme....- le pregunto, y esa rubiecita solo hizo un ademán y dio vueltas sobre sus talones indicando que la siguiera, la más adulta solo la obedeció, llegaron así  a una habitación, la puerta  de esta se encontraba cerrada, la muchachita apoyo su puño sobre la madera tocando dos veces y una voz, masculina, pronto respondió  otorgándole su permiso para ingresar.

-Que sucede Rinnel? -interrogo aquel hombre robusto y de gran peso, Ann al verle sintió un escalofrío atemorizante recorrerle, algo comenzaba a preocuparle.

- Esta, chica viene a solicitar el empleo, jefe- le comento su guía, aquel personaje enfoco su vista en la figura que acompañaba a su ayudante,  miro detenidamente a la joven de pies a cabeza, ese acto solo hizo que las ganas de salir huyen de la postulante se hicieran más fuerte

- Puedes retirarte -la rubia se fue  dejándola a su suerte, la de cabellos oscuro que no era nadie más que Annabella, se sintió temblar- Toma asiento- le pidió, intentando ser cortes aunque no llegaba ni siquiera a rozar esa actitud, ella acato lo dicho- Dime qué edad tienes?

-Diecinueve- respondió simplemente, las preguntas continuaron ella develo todo lo necesario, para asegurarse el puesto pero llego la más temida si poseía alguna experiencia laboral, ella se vio obligada a decir que si bien aún estudiaba y  poseía varios tipos de títulos no los había ejercido como debiese, pero insistió en el punto que el trabajo le era necesario por motivos económicos.

- Difícil, si no posees experiencia suficiente es complicado lo debes saber- le comento  aclarando lo obvio, definitivamente vio una negativa frente a sus ojos- Muy bien de momento podrías comenzar como camarera- le propuso, ella sonrío incrédula, como opción de reserva no estaba tan mal - Crees poder hacerlo?-ella asintió...

- Cuando empezare mi labor Míster,  podría indicarme los horarios a los que debo concurrir, y si no es indiscreción de cuanto dinero hablamos...- el sujeto sonrío y se acomodó mejor en la silla
-Pues comienzas mañana a las una de la mañana hasta  las ocho , primero pasaras una prueba y si todo sale bien te permitiré seguir con el trabajo, y de poder lograrlo, tu paga seria de trecientas libras más lo que logres conseguir de los clientes- lo último lo menciono con una sonrisa escalofriante bailando entre sus labios

-Bueno sin más me retiro adiós, un gusto...-mintió  mientras se levantaba del asiento, el no dijo nada solo asintió y la dejo irse....

-0-
Habían pasado tres meses desde su llegada y  Annabella no solo conservaba el puesto, sino que además era el espectáculo principal,  conducencia de un día que la descubrieron practicado con las bailarinas, padeció el temor de ser despedida, e intento disculparse reiteradas veces, al final el dueño declaro que tenía potencial y que si era capaz de montar un show, él le proponía incluirla. Esto no solo era un beneficio para él, sino también para ella, claro si es  de dinero lo que hablamos y entendemos...

Ella la vio  como una buena oportunidad, una forma de crecer que no podía desaprovechar, pero lo que ella había aceptado era más que eso y se arrepentiría al descubrirlo.

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"Me pregunto cuando la vida será capaz de sonreírme...."

Porta
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